¿Quién no ha tenido un mal rato entrenando o en una carrera por culpa de una mala digestión?
Pues a mí hasta ahora, solo me había pasado en entrenamientos y el sábado 29 de Enero me paso por primera vez en competición.
Era mi segunda participación en una prueba de
En la línea de salida, improvisada sobre la carretera principal que atraviesa Laudio, unos cien corredores esperaban a que el juez diese el pistoletazo de salida. No había pasado ni un kilómetro y ya empezaban a abrirse huecos entre los corredores. Cada uno a su ritmo, pero todos a tope.
Al pasar por el kilómetro cuatro, empiezo a notar un fuerte dolor en el costado derecho. Tengo claro que es debido al gran esfuerzo al que estoy sometiendo a mi cuerpo y a que en hora y media no he podido hacer la digestión.
No había respetado la regla de las tres horas para hacer la digestión y lo pague teniéndome que parar antes del quinto kilómetro. Mi carrera se había acabado.
La que si siguió en carrera fue Lola, que termino al sprint con otra fémina, venciéndola en los últimos metros. Un cuarto puesto que le deja un buen sabor de boca.